En este apasionante programa hablamos del mundo de los cuentos, que en la
actualidad, y como consecuencia de la factoría Disney, está prácticamente
vinculado a los niños, pero no fueron realizados con esa intención.
En sus comienzos, los cuentos, eran
un modo de tradición oral e iban dirigidos a los adultos, la mayoría
analfabetos y su propósito era claramente moralizador, pero ¿Habría mensajes
ocultos en el interior de los mismos?
Los cuentos son tan antiguos como la vida del hombre, siempre eran contados
oralmente al pueblo adulto de todas las culturas. Tenemos conocimientos de
cuentos escritos ya en el Antiguo Egipto, en el año 1300 a .c.
Es curioso que tengan elementos comunes en distintas culturas del mundo,
y esto se debe a que siempre han sido fruto de las experiencias humanas,
iguales en todas las razas y regiones. Los relatos con tramas, personajes y
motivos muy similares son encontrados en varias culturas diferentes.
Los cuentos pueden mimetizarse con el género de las leyendas, como si se
tratara de una realidad histórica, pero siempre tienen lugar en un tiempo
indefinido como: “érase una vez...” o “había una vez…”
Como
hemos dicho antes, los primeros cuentos estaban destinados principalmente al
público adulto y sus tramas tenían un trasfondo cruel y despiadado. No fue
hasta la aparición de los literatos preciosistas entre los siglos XVIII y XX
cuando empezaron a asociarse a los niños, suavizando sus tramas.
Hoy en día, no se puede hablar de cuentos sin nombrar al francés Charles
Perrault, a los alemanes Hermanos Grimm y al danés Hans Christian Andersen.
Tuvimos un invitado muy especial, un niño de 11 años llamado Manuel
Pablo, quien nos sorprendió a todos contándonos un cuento breve de su propia invención.
Incentivemos a nuestros niños a realizarse, escuchándolos y apoyándoles en su
creatividad. Tal vez así construyamos un mundo mejor, porque los niños de hoy serán
los hombres del mañana.
